"Yo quería ser Gabriel"...

"Yo quería ser Gabriel"A Boca llegó de 9 y soñaba con hacer goles como Bati, pero un día faltó el 2 y... Mañana será titular ante la lesión de Cáceres. "Estoy ansioso por demostrar", dice.

¿Roncaglia?

-Al no estar Julio, es la primera alternativa.

Facundo Roncaglia es uno de esos casos extraños pero que se dan en el fútbol. Era número 9, un buen día le restaron siete y lo convirtieron en 2. En ese puesto en el que nunca soñó jugar, debutó en Boca hace casi un año y, como dijo Carlos Ischia ayer por la mañana, se volvió la primera opción para reemplazar al paraguayo Cáceres, con una tendinitis en el aductor derecho desde el partido del miércoles ante Argentinos. 

La particular historia de este marcador central de 21 años arrancó en Chajarí, Entre Ríos, cuando se hizo famoso a fuerza de goles en el club Ferrocarril y así pasó a Newell's para compartir equipo con un chiquito que la movía de lo lindo. "Fue un solo torneo, antes de Infantiles, y aunque éramos muy chiquitos, se veía que Messi ya jugaba bien", cuenta, y aclara que nunca tuvo la posibilidad de hablar con el Pulga de ese tema. "No tengo idea si él sabe... Yo, como extrañaba, enseguida me volví a mi pueblo", cuenta. 

Tiempo después, ya más grande y preparado para la distancia, Jorge Griffa le propuso incorporarse a Boca y no lo dudó: se mudó a la pensión de Casa Amarilla. "Acá también llegué como número 9. Yo no pensaba jugar de otra cosa, pero...", se ríe cuando recuerda el día en que su técnico, Oscar Regenhardt, le preguntó si se animaba a jugar de número 2 por la ausencia del titular y del suplente en el puesto, justo antes de un superclásico de Séptima.

Por más que ahora su presente sea como defensor, el pasado surge inevitablemente en la charla con Roncaglia. Influye, como es lógico, en sus gustos y preferencias. En sus recuerdos de la infancia en Chajarí. "¿Qué jugador me gustaba de chico en mi puesto? Y no sé, puedo decir alguno por decir... Roberto Ayala... Porque el referente que tuve siempre no era defensor. Yo soñaba con ser Gabriel Omar, a mí me gustaba como jugaba el Bati y quería ser como él. Esa era la idea, pero me la cambiaron", dice, aunque la realidad es que como marcador central nadie pudo parar su progreso, con muy buenos rendimientos cada vez que le tocó jugar. Es que el entrerriano debutó el 21 de octubre del año pasado ante Estudiantes (1-1), con Miguel Angel Russo como técnico, y de ahí en más, ya con Ischia al frente, jugó otros nueve partidos en gran nivel.

-¿Cómo tomás que el técnico haya dicho que si falta Cáceres estás vos como primera opción?

-Lógicamente estoy contento porque creo que voy a jugar. Si bien no vengo teniendo mucho fútbol, espero poder rendir lo mejor posible. Cuando me tocó jugar pienso que lo hice bien, me parece que el cuerpo técnico, los dirigentes y la gente quedaron contentos conmigo...

-¿Te habló el técnico? ¿Ya te confirmó que vas a jugar con Tigre?

-En realidad, Carlos no me dijo nada, no me confirmó que iba entrar contra Tigre. Lo escuché por la tele cuando dijo que soy la primera opción si no está Julio y eso me puso muy contento. Ahora, sólo espero que se confirme, porque como no vengo jugando mucho estoy con ansiedad y tengo que demostrar lo que puedo dar. Tigre es un rival complicado, viene de ganar, pero nosotros necesitamos volver al triunfo.

-Y que jueguen seguido Chávez, Noir y Viatri debe ser un gran incentivo para los juveniles como vos...

-Sí, nos pone muy contentos, porque significa que el club está cumpliendo con lo que se dijo, que iba a darles lugar a los juveniles. Todos soñamos con la posibilidad de jugar cada vez más seguido. Y es muy importante para nosotros poder tener un lugar dentro de este grupo.