miércoles, 17 de septiembre de 2008

Digan Whischia...

Digan WhischiaSonríen los chicos del Xeneize, seis que debutaron en este ciclo. Algunos se ganaron un lugar y hoy hasta serán titulares contra el Bicho y otros alternan en el banco. Quiénes son y cómo viven este momento.

Los debutantes posaron para la foto. Arriba, de izquierda a derecha: Javier García, Viatri y Philippe. Abajo: Forlín, Nico Gaitán y Tito Noir.

Dale que me espera el micro y me tengo que ir". Ricardo Noir mira de reojo a Sebastián Battaglia, sentado para la conferencia de prensa. en cuanto el volante del grupo de los históricos se levanta de la silla para emprender el regreso a la concentración, Tito sale volando como si estuviera ya en La Paternal para enfrentar a la nochecita a Argentinos. Tiene claro que, más allá de ser una de las estrellitas en ascenso, no puede darse los lujos de los grandes. Claro, él forma parte del grupo de los pibes, ese grupo que cada vez se engrosa más, a medida que Carlos Ischia los va haciendo debutar en primera. Además del delantero de la trencita estilo Palacio, los que conforman el piberío son Lucas Viatri, Nicolás Gaitán, Juan Forlín, Javier García y Jonatan Philippe. Ayer, el sexteto estuvo concentrado. Y, si bien el técnico confirmará el banco un rato antes del partido, hay muchas chances de que todos ellos se sienten en el banco de suplentes, más allá de la dupla titular. 

La buena onda que existe entre ellos, más allá de que no son de la misma categoría, se nota. Hace muchos años que la vienen remando, cada uno desde su división primero y luego en la reserva, y ahora les toca disfrutar de este presente juntos. Ellos son los que arrancaron con el camino del recambio. Aprenden de los históricos y tienen la misión de continuar en el tiempo la mística ganadora a la que acostumbraron a los hinchas los Palermo, los Riquelme, los Battaglia y los Ibarra. Y eso no los achica, como tampoco lo hizo tener que reemplazar a los grandes el semestre pasado, cuando los titulares jugaron la Libertadores, o este semestres por lesiones y convocatorias. 

En diciembre, cuando volvió de Japón, Pedro Pompilio anunció que el 2008 iba a ser el año de consolidación de los juveniles. Por eso también se apostó por un técnico que se fijara en la cantera. Y lo sostuvo con hechos: ahora no hubo incorporaciones más allá del regreso de Calvo y de la llegada de Damián Díaz (cero minuto en primera). "es muy lindo que confíen en los chicos del club", dice Javier García, acostumbrado a tener arqueros de afuera delante suyo. "Yo estoy muy tranquilo. Sabemos que en un plantel como Boca siempre la tenés que pelear. Y si viene alguien, la pelearé igual, como hasta ahora", asegura Viatri, el reemplazante del Loco, que antes lo miraba por tele y ahora ocupa su lugar. Los seis, además del resto de los pibes que forman el plantel (Roncaglia y Chávez) destacan las chances que les da Ischia, quien los hizo debutar. "Nos habla mucho y se la juega por nosotros", dice Nico Gaitán, el héroe ante Huracán, en la misma cancha en la que se jugará hoy. "Nos pide que estemos tranquilos y que hagamos lo que sabemos", agrega Tito Noir. "Lo bueno es que sabés que el técnico siempre te está mirando, en las prácticas y en reserva", explica Philippe, el más nuevo en el club, quien llegó desde Huracán y debutó justamente ante su ex equipo. Ojo, las flores también caen en los grandes, en los hombres que apuntalan a los pibes: "es clave saber que estás respaldado por gente como Seba, Román, Martín, el Negro... sin ellos atrás nuestro no sería sencillo", cuenta Forlin, central elegante. Y en eso también coincide el entrenador. Algunos ya tienen nombre propio, como Viatri y Noir, quienes alternan en el primer equipo desde el semestre pasado; es más, el lungo que jugó de chico en Argentinos viene teniendo continuidad. García saltó a la fama cuando se fue Migliore y el presidente del club lo bancó como suplente de Caranta. Forlín regresó de un préstamo en el Real Madrid B y alterna con la reserva. Y Gaitán y Philippe son las dos más recientes apariciones. Más allá de esas pequeñas diferencias, la vida les cambió a todos, si hasta cinco de los seis tienen la medalla de la Recopa... 

Se tuvieron que acostumbrar a las concentraciones, más aún en esta época de seguidilla; muestran orgullosos sus nuevos equipos deportivos, se preocupan por cumplir los horarios, por no ser los últimos en subir al micro o llegar al almuerzo; tratan de sobresalir sólo adentro del campo. Y comparten con todos, A pesar de la diferencia de edad, estilos musicales o la Play Station. El sexteto se siente con confianza para hoy: cinco de los seis jugaron en la victoria ante Huracán, en el Diego Maradona. En ese 3-0, los goles justamente los convirtieron dos: Viatri y Gaitán (2). Sueñan, entonces, con repetir esa historia feliz. Y ese canto que los enorgullece... "Vamos, vamos los pibes".

1 comentario:

Ángel R. dijo...

Buenas,es bueno que los de la oportunidad de jugar con el primer equipo,venga,saludos!
www.atleti1903.blogspot.com