miércoles, 26 de noviembre de 2008

Blog Cerrado Hasta Nuevo Aviso !


Bueno gente...como veràn no actrualize mucho el blog...

es que no me alcanza el tiempo...

pido disculpas a la gente que entra siempre al blog....

Pero les prometo que cuando vuelva el blog...
Me pongo las pilas...  
Lo voy a actualizar todos los dìas...
y va a estar muy remodelado...


Desde  ya muchas gracias a todos los que entran a mi blog....
ya que sin ustedes... no podria expresar mi amor hacia Boquita =)...


Saludos ATTE Feeeeeeeeeeeeeeeeeeer xPx

faph_94@hotmail.com

Pasen devuelvo al toqe =)

sábado, 15 de noviembre de 2008

Boca VS Velez


Partido con suma importancia para el conjunto xeneize por la lucha del campeonato,
ya que San lorenzo empatò con Newell's 3 a 3 luego de ir ganando 2 a 0, y de esta manera...ganando en La Bombonera contra el  fortìn quedarìa en soledad primero en la tabla, a falta de solo 4 fechas del final del campeonato...

En Boca volverìa Palacio tras la recuperaciòn de la pubialgia, pero solo entraria algunos minutos, ya que desde la 9na fecha del presente torneo, no juega...donde boca perdiò por 2 a 1 con el pincha...

Las probables formaciones son:

BOCA:
Javier García; Facundo Roncaglia, Julio Cáceres y Juan Forlín; Hugo Ibarra, Fabián Vargas, Sebastián Battaglia y Jesús Dátolo; Juan Román Riquelme; 
Pablo Mouche y Lucas Viatri. Y también quedaron concentrados: Josué Ayala, el defensor Ezequiel Muñoz, los mediocampistas Alvaro González, Leandro Gracián y Nicolás Gaitán y los delanteros Ricardo Noir, Rodrigo Palacio y Luciano Figueroa.Y todavìa Ischia no confirmò quien se quedarìa afuera del banco.


VELEZ:

En el visitante, el técnico Hugo Tocalli aún no definió a sus 11 iniciales, aunque la probable alineación sería: Marcelo Barovero; Gastón Díaz, Mariano Uglessich y Marco Torsiglieri; Coronel, Fabián Cubero, Zapata y Emiliano Papa; Martínez, Nanni y Cristaldo.

Saludos Gente!

espero que no se desperdicie esta oportunidad de quedar primeros en soledad, y asì no depender de nadie en los 4 partidos restantes.

Feeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeer xPx

jueves, 13 de noviembre de 2008

Charla, de ''7'' a ''7''
Tira el centro el ídolo desde Estados Unidos, define el heredero en Buenos Aires: "Vos le dejaste toda la magia". Una charla a puro fútbol y buena onda entre dos tipos unidos por la 7 y un innegable parecido.

Como Guille, tira centros con las dos pero es zurdo. Es encarador, hábil y tiene su carácter.

Guille? ¡Qué hacés, Guille! ¿Cómo anda todo por ahí?

-Bien, Pablito. Por acá todo muy bien. Te felicito a vos, que estás haciendo quedar muy bien a esa camiseta, ja...

-Es la camiseta, es la camiseta, Guille... La dejaste con toda la magia.

No hace falta ninguna introducción para animar la charla. De un lado, en una fresca tarde que anticipa el invierno americano, Guillermo Barros Schelotto, el dueño histórico de la 7 de Boca. Del otro, en una tardecita que anticipa el verano porteño, Pablo Mouche, el inquilino que le hace honores. Y en el medio, una conversación a puro fútbol, a puro Boca, con la admiración y el cariño mutuo como hilo conductor. Un afecto que nació en el vestuario, en casi dos años compartidos en el club, y que hoy se prolonga más allá de la distancia.

G: Te vi en los últimos partidos y estuviste muy bien. Con Central metiste un centro bárbaro, con Banfield hiciste un golazo, contra San Lorenzo pusiste un tiro en el palo y jugaste muy bien... Te felicito. Cuando me llamaste para pedirme permiso para usar la número 7, te dije que la tenías que dejar bien parada. Y me alegra que lo estés cumpliendo...

M: Gracias, Guille. Me pone muy contento esto que me decís. Y quiero agradecer la confianza que siempre me tuviste. No me olvido de todos los consejos que me dabas. Ahora, de premio tenés que mandarme una camiseta, pero la amarilla, eh. Y yo te mando una mía. Bah, una tuya...

-Alguna 7 de Boca debés tener, ¿no Guille?

G: No tantas, porque la verdad que las fui regalando casi todas. Así que me va a venir muy bien... Cuando vuelva a la Argentina, te la llevo, Pablo.

-¿Qué consejos te daba Guillermo?

M: Me decía que confiara en mis condiciones, que encarara... Y que iba a llegar lejos. Yo ya lo admiraba antes de ir a Boca, pero cuando lo conocí en el club, lo tomé como mi ídolo máximo por lo futbolístico y también como tipo. Además de ganar todo, siempre tenía buena onda y mantenía la humildad.

-¿Y ahora qué consejo le darías, Guille?

G: Que sea inteligente. Ahora aparece la fama, te hacés más conocido, te quieren todos, y eso es inevitable. Pero lo importante es mantener la inteligencia necesaria y seguir jugando de la forma que te llevó a la Primera. Mantener la cabeza en el fútbol.

M: Seguro, eso no lo dudes. Porque además vi que vos lo hiciste así durante todos los años en Boca. Y una de las cosas que más quedó es ese hambre y profesionalismo para seguir ganando cosas. No va a ser fácil alcanzar a Guille, que es el que más ganó en el club, pero por suerte, después de remar mucho de atrás, por fin estamos primeros en el torneo. Así que con suerte, si se dan las cosas, por ahí le descuento algún título antes de fin de año, ja, ja...

G: Mirá, yo cuando llegué a Boca quería ganar un campeonato, aunque sea uno local, y fijate lo que logramos. Con tranquilidad y trabajo, todo llega. Uno, dos, diez, quince... Hay que prepararse para ganar y nada más. O mirá a Battaglia e Ibarra, que ya están por alcanzarme. Y disfrutá todo el tiempo que te toque jugar en Boca. Es difícil encontrar en el mundo un club como Boca: la pasión del hincha es única.

-¿Qué cosas tuyas le ves a Pablo?

G: Que por lo general sabe resolver bien en el área. Sabe cuándo tiene que darle el pase a un compañero mejor ubicado y cuándo tiene que patear, como hizo con Banfield. Son decisiones que se toman en el momento y no es fácil elegir lo correcto. Esa característica siempre la tuvo. Cuando llegó a Boca, por ahí jugaba más de 9 de área, pero ahora encontró su lugar por afuera.

M: Cuando llegué a Boca traté de jugar por los costados como él, copiarle las diagonales, las gambetas para encontrar un espacio y sacar un centro, buscar la resolución correcta. 

-¿Y copiaste la picardía?

M: Es difícil porque es algo innato. Tiene que ver con la personalidad. Pero de compartir tanto tiempo en el vestuario, algo me quedó, je, je... Igual, ojo que tengo mi carácter.

Algo de eso se necesita para usar la camiseta de un ídolo. Lo sabe Pablo, se enorgullece Guille. Entre sietes se entienden...

Paletta ya pasó por el cuchilloEl defensor fue operado de la rotura de ligamentos de la rodilla derecha. De 5 a 8 meses sin jugar.

LA CIRUGÍA DURÓ UNA HORA.

Para Gabriel Paletta ya comenzó la cuenta regresiva. El defensor de Boca pasó ayer por el quirófano por la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha que sufrió el domingo ante Arsenal pero que fue detectada el martes luego de los estudios que se realizó en los laboratorios del TcBA. La intervención quirúrgica, a cargo del doctor Jorge Batista, se llevó a cabo en el sanatorio Agote y duró cerca de una hora. El jugador pasó la noche allí y hoy podrá irse a su casa. 

La operación fue todo un éxito y ahora el central, que más allá de la bronca por la lesión se mantuvo siempre de buen ánimo, comenzará con la lenta rehabilitación. Primero deberá estar unos días en reposo, hasta que se le coloque una férula, que le mantendrá inmovilizada la zona. Luego, una vez que le quiten los puntos de sutura, el ex Banfield podrá comenzar a caminar lentamente. El tiempo de recuperación dependerá de la evolución que vaya teniendo la lesión, pero podría estar fuera de las canchas entre cinco y ocho meses. La cuenta regresiva ya comenzó para él.

martes, 11 de noviembre de 2008

Paletta Lesionado...


Malas noticias para Ischia...
En el partido contra ''el arse'', Paletta tenia un dolor en la rodilla, pero no el dolor no le impidiò seguir en el campo de juego...
Ayer Paletta fue sometido a un estudio para ver que lesiòn y el grado de lesiòn que tenìa...
Hoy a la mañana llego el resultado del estudio que determino que Paletta sufriò una rotura de ligamentos de la rodilla izquierda, que no le permitira jugar entre 5 y 6
meses....Recordemos que Martin Palermo todavìa se està recuperando de esa misma lesiòn...
Los recambios que puede hacer Ischia  son :
*Poner a Forlìn en lugar de Paletta.
*Poner a Roncaglia en lugar de Paletta.
*Poner a Morel Rodriguez en lugar de Paletta, o en lugar de Càceres y poner a Càceres en lugar de Paletta, y de 3 irìa el juvenil Fòndacaro...

Por ahora tiro algunas de las desicioneses que puede tomar el D.T. de Boca.

FUERZA GABII!!
OJALA TE RECUPERES PRONTO.
SALUDOS EN NOMBRE DE TODA LA FAMILIA BOQUENSE.

ATTE. Feeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeer xPx

domingo, 9 de noviembre de 2008

Boca 1 - Arsenal 0


Buee primero que todo quiero pedir disculpas...por no poder actualizar el blog por algunos motivos...

Gracias a los que igual me bancan...


Ahora si : Resumen del partido.

En el partido se notò un Arsenal cerrado atràs...muy compacto...para que el diez de Boca no toque la pelota.
Y un Boca sin poder hacer mucho daño por ese motivo.
Arsenal atacò varias veces con Leguizamòn y Gomèz tratando de sorprender, pero nunca tuvo una idea fija de como atacar, y en algunas veces no fueron muy precisos, se notò un Arsenal impresiso en los 45 iniciales y en gran parte del complemento...Por el lado xeneize el ataque se baso por los laterales, ya que Romàn tenia obstruido los caminos hacia el arco, Boca atacò varias veces con Vargas, Dàtolo y con Ibarra. Pero salvo un par de jugadas, no tuvo mucha presicion...Noir tuvo una actuaciòn floja, como viene pasando hace ya varios partidos, Viatri tampoco pudo hacer mucho, ya que los ataque por los costados casi siempre terminaban en un tiro al arco o un centro mal realizado...ya que en gran parte del partido estuvieron imprecisos los laterales...

Los 45' primeros terminaron con un 0 a 0.

En el complemento parecia que los dos equipos habìan cambiado la actitud y atacaron con ida y vuelta durante varios minutos...
Luego el juego se traladò a la mitad de cancha donde Romàn trato de poder liberarse de las duras marcas que le proponia el mediocampo contrario...
Mouche, entrò por un Noir desentonado... pero no apareciò por lo menos por los primeros 20' del complemento....
Boca empesò a atacar ya con Riquelme un poco mas activo...
Pero la actuacion de Campestrini fue determinante para que el encuentro siguiera 0 a 0... Arsenal no tuvo muchas chances... 
Aunque rondando los 30' minutos de la 2da parte tuvo una chance muy clara con un centro ''buscapie'' del papu Gomèz... que terminò en saque de arco... ya que ni Leguizamòn ni el debutante de Arsenal llegaron...
Luego Boca propuso un juego muy inclinado a querer hacer el gol del triunfo...
No lo logrò...
Pero a los 45' minutos clavados del complemento...
le quedo un tiro libre a Juan Romàn Riquelme, tras una falta hecha a Graciàn...
Y con una mejestuosa pegada ''A lo Romàn''... Puso el 1 a 0 definitivo...
Hoy.. terminada la 14º fecha...podemos decir que boca esta puntero junto con San Lorenzo con 29...
ya que Tigre empatò y quedò con 27...


Vamos Boqitaa!  



Saludos Cordiales.


Feeeeeeeeeeeeeeeeeeer xPx


miércoles, 5 de noviembre de 2008

El punto G

G de Gracián, G de Gaitán, G de gol. Eso es lo que necesita Boca para dar vuelta la serie vs. D´Alessandro y Cía. Confiados, creen que se gana con presión adentro y afuera: "Ellos no están tranquilos".

El Tano y Nico, ante un partido muy chivo.

No entramos obsesionados con asistir al 9, pero sí pensando en hacer eso.

-También tenemos que llegar al gol, Carlos nos dice que tenemos que pisar el área seguido.

-Ahora, por la necesidad de golear, más que nunca...

Los dos soñaban con ser Riquelme. Cada uno por su lado, en distintos momentos, pegaron alguna vez en sus cuartos el póster del ídolo. De chiquito les gustó el 10, fue el número que siempre pidieron llevar. Sea en Parque Chás o en el barrio Primavera de José C. Paz. Leandro Gracián y Nicolás Gaitán soñaban con lo mismo, con el pase perfecto que terminara en gol de un compañero, con manejar un equipo, con el lujo y la elegancia, con el tiro libre al ángulo. Sus posiciones naturales se superponen, se enciman. Pero ante el buen nivel en el que viene cada uno por su lado y la necesidad de revertir el 2-0 de la ida en Porto Alegre, Carlos Ischia eligió juntarlos a los dos. Doble 10, doble G, punto G. Gracián, Gaitán, ganar, gustar, golear... Con Román, el referente de ambos, sentado en el banco.

-'Pueden jugar juntos como armadores?

NG: Poder, se puede. Pero a mí el técnico me va a poner por izquierda.

-'Y cómo se sienten compartiendo equipo?

LG: Bien, sí. En los entrenamientos estamos bien, con Newell's salí yo y entró Nico. Y con Liga estuvimos un rato juntos. Compartir la cancha con jugadores de buen pie te simplifica mucho las cosas.

-'Viven el fútbol de la misma manera?

NG: Sí, creo que todos los sentimos igual.

-Pero a algunos les es más fácil tirarse al piso que tirar caños...

NG: A mí me cuesta más tirarme al piso, je. Me parece más jodido tener que correr todo el partido.

-'Se consideran una raza en extinción?

NG: Lo que pasa es que no hay. En Inferiores ya arman 4-4-2 y a los enganches los tiran a los costados. Y por eso, después, ni en Primera juegan con enganches.

LG: Pero en Boca, desde la llegada de Román, como se ganó tanto con enganche, muy pocas veces no se respetó ese puesto. Se nota en este club que hay un respeto muy grande por el número 10.

Gracián es el mayor de los dos, con 26 años, y llegó como reemplazante de Riquelme a comienzos de la temporada pasada. Gaitán tiene 20, apareció el semestre pasado y rechazó una oferta del Almería de España para afianzarse en Boca. El que más habla, por edad y experiencia, es el Tano. A Nico todavía le cuestan los micrófonos, pero le pone buena onda. Los dos, hoy, están en el mismo lugar. "Es un partido muy importante, para pasar a una semifinal, y nos sirve para mostrarnos. Porque si no tenés la continuidad que te gustaría tener, es una chance de demostrarle al técnico que tiene un buen plantel", explica el ex Vélez, contento por la respuesta de los hinchas en las boleterías. "Ojalá que la cancha esté llena. Nos motiva mucho para tratar de clasificar", agrega.

-'Se ven clasificados?

LG: Para mí, internamente, todos tenemos que sentir eso, sin decirlo.

-'Y se imaginan una semifinal con River?

LG: La verdad es que no se me cruzó por la cabeza.

NG: Lo que sucede es que primero tenemos que pasar. Y River también, y ellos la tienen un poquito más complicada...

-'Cómo viven el momento de River?

NG: A mí me da lo mismo, pero no es lindo verlo así, que pierda tanto, ya te da como un poco de... Ellos tienen sus problemas y deberán solucionarlos.

-Inter, por su parte, ya hizo las visas para ir a jugar a México con Chivas las semifinales...

LG: A nosotros no nos interesa, nos tiene sin cuidado. Boca juega ante su gente y sólo pensamos en cómo tenemos que encarar el partido.

-Para intentar dar vuelta la historia deben mantener el arco en cero...

LG: Creo que es fundamental. Atrás debemos estar sólidos y atentos. Con esa seguridad, los de adelante podemos tratar de definir las jugadas que tengamos. Las que tengamos tienen que ser goles.

-La Bombonera siempre ayuda. En Brasil se habla desde hace varios días de lo difícil que es...

LG: Ojalá que tengan miedo. Esta cancha tiene una tradición y la realidad es que a los rivales les cuesta sostenerse. No sé si se van a achicar, si ésa es la palabra adecuada, pero todo depende de lo que hagamos dentro de la cancha. Si mostramos la misma actitud que ante la Liga, presionamos y recuperamos rápido la pelota en campo de ellos y empezamos a jugar, más la ayuda de la gente, creo que los brasileños se van a sentir un poco tocados. Yo jugué en la Bombonera con Vélez y sé que la gente juega un partido aparte.

NG: Ellos saben en su interior que por más que tengan dos goles de ventaja no es fácil venir a jugar en la Bombonera. Creo que no están tranquilos.

domingo, 2 de noviembre de 2008

BOCA 1 - SAN LORENZO 0


HOMENAJE. Riquelme, con una remera en honor a Pompilio, llama a todos sus compañeros para festejar el gol de Boca.

Para vos, Pedro

Los jugadores le hicieron el mejor homenaje a Pompilio. Le ganaron al Ciclón en la Bombonera y alcanzaron la punta del torneo, que comparten con su rival de hoy y con Tigre. Riquelme, que mostró una remera recordando al presidente, hizo el único gol del partido. El campeonato está que arde a seis fechas del final. 

7m del primer tiempo. Gol de Riquelme, de tiro libre. (Mitre)




Estaba a tiro Boca. Con la derrota de Tigre en La Paternal, el equipo de Ischia tenía una oportunidad única en la Bombonera. Recibía a San Lorenzo y, de ganar, alcanzaría la punta por primera vez en el Apertura, a compartir con el Ciclón y el Matador. Una Bombonera de luto por la muerte de Pedro Pompilio, que le dio un dramatismo aún mayor al clásico. 

Fue Mouche finalmente el acompañante de Viatri en la delantera de Boca. Adrián González se quedó afuera del clásico, y Russo tuvo que cambiar. Acevedo a la cancha y Rivero unos metros más atrás. Pero era Riquelme el que manejaba el partido en los primeros minutos. Al minuto, Mouche probó de derecha e hizo revolcar a Orión. San Lorenzo, perdido, no reaccionaba en el arranque. Salió dormido el Ciclón. Y Román aprovechó... 

A los 7, Hirsig le puso la mano en el pecho a Riquelme sobre la izquierda. Pezzotta pitó la falta. Román le dio fuerte, por abajo. La pelota esquivó a la barrera, Viatri no le pudo pegar en el primer palo, pasó entre las piernas de Tula, y se metió en el segundo palo, sin que la toque nadie, descolocando a Orión. Gol de Riquelme y 1-0. El enganche lo gritó, se levantó la diez y le dedicó el tanto a Pompilio con una remera blanca con letras negras: "Gracias por todo, Pedro". Boca ganaba en el arranque, jugaba mejor y se subía a la cima del torneo. 

Pasaban los minutos y Boca se lo comía a San Lorenzo. Roncaglia, Cáceres y Paletta estaban firmes en la línea de tres que paró Ischia atrás. Vargas y Battaglia, dos leones en el medio. Ibarra y Dátolo por los costados. Román activo, Mouche iluminado y Viatri arriba. Todo lo contrario pasaba con el improvisado esquema de Russo. Encima Tula tuvo que dejar el campo lesionado. Rivero de cuatro, Meza y Bianchi Arce, más Aureliano. Hirsig, Ledesma, Acevedo y Barrientos, perdidos en el medio. Bergessio luchando arriba y Silvera desaparecido. Por todo eso, Boca tuvo al menos cinco chances claras de aumentar el marcador. 

A los 25, Román desbordó por derecha y tiró el centro al corazón del área chica, pero nadie llegó para empujarla. Un minuto más tarde, Mouche probó desde afuera y la pelota dio en el palo izquierdo de un estéril Orión. A los 33, otra vez Mouche capturó un rebote en el área y envió el buscapie, no alcanzó Riquelme a tocarla al gol. Dos más tarde, Combinaron Dátolo y Mouche por izquierda, cento y Viatri que se lo pierde de cabeza. Por último, a los 37, Mouche para Dátolo, disparo, Orión la toca, llega Viatri para festejar, y Orión que se rehace. Boca mereció irse al vestuario con una diferencia mayor. 

Para el segundo tiempo Boca salió con las mismas ganas de ganar el partido, y San Lorenzo con el mismo desorden. Seguía generando jugadas de peligro el local. Al minuto, Paletta lo tuvo en el área, tras una pelota parada, pero Orión le ahogó el grito. A los 13 fue Vargas el que lo tuvo, pero también falló frente al arco... 

Entonces Boca se fue quedando, y a pesar que San Lorenzo no tuvo una buena tarde, de a poco, fue despegando del fondo. Russo metió mano: a la cancha Adrián González, que en la primera que tuvo le dio de tiro libre y tapó muy bien Javi García. 

Se frenó Riquelme, Figueroa ya había reemplazado a Viatri, Gaitán estaba en lugar de Mouche y Boca se paró para jugar de contra, aunque sin lastimar. Sin embargo, era Battaglia el que seguía cortando cada avance de San Lorenzo en el medio. El cinco local era la figura. Entonces, el Ciclón era intrascendente y Boca ya no tenía nafta para atacar. 

Empujó el visitante. Aunque llegó con real peligro en una sola ocasión. A los 32, Adrián González desbordó por derecha y envió el centro. Acevedo, sin marca, en el corazón del área, cabeceó por encima del travesaño y se perdió el empate. Fue esa y ninguna más. Se afirmaron Cáceres, Paletta y Roncaglia. Battaglia y Vargas, impenetrables en el medio, aunque el colombiano, amonestado, pegó de más. Aguantó entero Boca hasta el final. Pezzotta pitó y estalló la Bombonera. Boca le ganó a San Lorenzo 1-0. Los jugadores y Leandro, el hijo de Pompilio, se abrazaron para celebrar el triunfo que les permite subirse a la punta del Apertura, para gozar del cuarto triunfo al hilo, y para homenajear al presidente que se fue...

jueves, 30 de octubre de 2008

Fallecio Pedro Pompilio.

El presidente del club Xeneize tenía 55 años y sufrió un infarto esta mañana. Había asumido el cargo en diciembre pasado, tras imponerse en las elecciones y luego de la salida de Mauricio Macri. 

DE LUTO. El fútbol argentino está conmovido por la muerte de Pompilio.


A todos nos duele mucho que haya fallecido Pedro", indicó Serna. (La Red)
Un profundo sentimiento de tristeza invadió al fútbol argentino. Pedro Pompilio, presidente de Boca, murió esta mañana a causa de un paro cardíaco. Tenía 55 años y había asumido en diciembre del año pasado, aunque su trayectoria como dirigente se remontaba a la década del ochenta. 

Desde 1995 hasta 2007, Pompilio fue vicepresidente de la institución, durante la gestión de Mauricio Macri. Y también era vicepresidente segundo de la AFA. "No puedo hablar. Era un hijo para mí. Lo vi nacer. Tuvo luchas bravas, él estaba sobreviviendo en un club como Boca, que no es fácil'', dijo llorando Julio Grondona, en declaraciones a Radio Del Plata.

En tanto, Antonio Alegre, presidente de Boca entre 1985 y 1995, también manifestó su consternación. "Tengo un disgusto encima, una tristeza, una amargura, porque era una persona excelente... Yo era feliz con que él sea presidente de Boca. El daba todo por el club, tenía una línea de conducta extraordinaria. Era un señor en todo aspecto". 

Pompilio estaba casado y tenía dos hijos. Su familia y Boca eran sus dos grandes pasiones. Al club llegaba bien temprano y se retiraba muy tarde, pese a que además era dueño de una fábrica de papel. Durante su corta gestión como presidente tomó la decisión de repatriar a Riquelme, en una transferencia millonaria. Y en las últimas semanas tuvo que lidiar con la difícil situación interna que vivió el plantel de Boca. Dio la cara siempre, para defender a Román y también para intentar calmar las aguas. Su próximo objetivo era remodelar la Bombonera y así terminar con el problema de la escasez de entradas. Se fue Pompilio, lo llora todo el fútbol argentino.


miércoles, 29 de octubre de 2008

Video del gol de Pablo Mouche

Boca 1 - Banfield (local) 0

El equipo de Ischia derrotó al Taladro como visitante. El partido era parejo, pero apareció a los 34 del segundo tiempo el pibe Mouche con un golazo. Ahora, el Xeneize está a sólo tres puntos del líder Tigre y a dos puntos de San Lorenzo, que está jugando.

DESENCAJADO. Mouche festeja su gol con mucha euforia.

Otro pibe salvó a Boca. Esta vez no fueron Viatri, Noir y Gaitán. El aparecido fue Pablo Mouche, que el domingo ante Central ya había mandado el centro de la victoria. A los 34 minutos del segundo tiempo, encaró por izquierda ante una defensa muy parada, se metió en el área y definió con un tiro alto y cruzado ante la salida de Bologna para el festejo del pueblo boquense. Ese que ahora sueña con un San Lorenzo que no queda tan lejos.

No se esperaba que Boca la tuviera fácil en el Sur, y el primer tiempo del partido ratificó esa presunción. Banfield presionó con inteligencia a los generadores de juego del rival y evitó sofocones en defensa, en un primer tiempo en que ninguno de los dos equipos mostró argumentos para desequilibrar.

El local llegó con mucho peligro en una de las primeras jugadas del encuentro. A los 3 minutos, volvió a quedar demostrado que, más allá de algunos buenos resultados, este Boca no termina de encontrar un funcionamiento defensivo adecuado. Dos veces se tuvo que revolcar Javier García para salvar un gol casi seguro ante la llegada de Civelli.

Con ese comienzo, pareció que podía ser un partido de ida y vuelta. Pero fue un espejismo. Sólo alguna contra esporádica de Banfield o algún centro aislado de Boca amagaron con generar algo de inquietud.

Los de Ischia quedaron enredados en el prolijo armado de Banfield en la mitad de la cancha. Sus contadas aproximaciones fueron a través de envíos aéreos en busca de la cabeza de Viatri, bien controlado por la defensa local. Riquelme siguió muy bien marcado y Datolo se perdió en el barullo.

Así llegó el final del primer tiempo, con un trámite más propicio para Banfield que para un Boca necesitado de ganar para sumarle presión a San Lorenzo.

En el complemento, los de Ischia modificaron la actitud y se mostraron como el equipo que realmente precisaba la victoria. Enseguida, a los 4 minutos, estuvo cerca Riquelme con un tiro que Bologna le sacó del ángulo. Y a los 8, en la mejor jugada colectiva del equipo, Viatri estuvo cerca pero no pudo empalmar bien la pelota dentro del área.

Banfield se había quedado y prácticamente no inquietaba a un Javier García mucho más inseguro que en los partidos anteriores. El arquero sin embargo fue clave a los 29 minutos, cuando un pésimo rechazo de Battaglia cayó en el pecho de Bustamante en el borde del área. Le dio de volea y la pelota, tras manotazo de García, dio en el travesaño y se fue al corner.

Y entonces llegó la jugada del partido. La recibió Mouche por izquierda y, como había hecho contra Central, encaró sin miedos. Se sacó de encima la marcha y, cuando quedó mano a mano con el arquero Bologna, sacó un tiro alto y cruzado que se clavó adentro para el 1 a 0. Golazo.

Entonces apareció el oficio de Boca para mantener el resultado. Ese equipo que sigue mostrando falencias, sobre todo en la última línea, pero que confiado siempre será un adversario de temer para cualquiera. Quedó así, con su tercera victoria consecutiva, muy bien parado para el decisivo partido del domingo ante San Lorenzo. Esa prueba de fuego que puede determinar buena parte del destino del Apertura.

martes, 28 de octubre de 2008

"Todos saben cuál es mi deseo"
A horas del partido clave vs. Banfield, el DT celebró los 52 años y la gente le cantó por el cumple. Sueña con el título y con quedarse...



'Tengo que pedir un deseo antes de soplar las velitas?

-No, tres. Y olvidate el del pelo. Ese no se va a cumplir nunca más, je.

La bandera está desde temprano en la tribuna de la cancha principal de Casa Amarilla. "Carlos: Feliz cumpleaños. Gran DT", dice, en letras blancas prolijamente cosidas sobre el azul y amarillo. Carlos, que es Ischia, se da media vuelta apenas ingresa al campo de juego, la mira, sonríe y agradece el saludo por su cumple número 52, justo en la previa de dos partidos decisivos, hoy ante Banfield y el domingo contra San Lorenzo.

Todavía no hay mucha gente en la tribuna cuando el Pelado aparece por primera vez en el campo de juego y recibe el saludo. Esa bandera se encargará de hacerles saber a todos los que van llegando que el DT se encuentra en un día especial. "Soy el técnico de Boca, hoy es mi cumpleaños y en Olé se olvidaron de ponerme en la página 2", reclama, siempre con una sonrisa.

Nacido el 28 de octubre de 1956, el Pelado arrancó su natalicio concentrado en el hotel Intercontinental y pensando en lo que se juega su equipo (y también él, que se fijó como prioridad del semestre este torneo) esta semana. Preocupado por cómo llegan Morel Rodríguez y Juan Román Riquelme. Y a la vez recibiendo saludos telefónicos de su mujer, de sus tres hijas y de su hijo Junior, quien se encuentra en Tandil jugando en el club Santamarina. "Cuando lo vea le voy a llevar el regalo, pero es difícil elegirle algo con todo lo que le dan", cuenta el único hijo varón del DT xeneize. Y aunque tampoco recibió ningún regalo de parte de sus jugadores, todos saben cuál sería el mejor obsequio.

Los hinchas, fieles al conductor del equipo, son los que no dejan pasar la oportunidad. Además de la bandera, una vez que termina el entrenamiento y se dirige rumbo al vestuario, tienen preparada una sorpresa: "¡Que los cumplas feliz, que los cumplas Carlitos...!", arranca el Relojero Luis, y se prende buena parte de las 200 personas que ya hay en la tribuna. Entre ellos también está Carlos Guardia, autor de la bandera y amigo de Ischia desde que empezó a jugar en Vélez. "Adentro tengo los regalos", avisa, y cuenta que conoce al DT de Ramos Mejía, que viven a seis cuadras y que las hijas de ambos fueron juntas al colegio.

Puertas adentro, en el hall de Casa Amarilla, sobre una mesa el amigo del técnico tiene desplegada nuevamente la bandera, una torta con los colores de Boca con su respectiva vela y una caja con dos vinos en la que gastó casi 300 pesos. También lo espera Pascual, un italiano fanático que está en casi todos los entrenamientos y es conocido por todos los jugadores e integrantes del cuerpo técnico. Cuando Ischia aparece, ya duchado, se emociona y se abraza con ellos. El Tano le canta el feliz cumpleaños en su idioma natal. Su amigo Carlos le entrega el regalo y le muestra la torta. "No la llevo a la concentración, hay que comerla en el lugar", avisa el Pelado. Y enseguida, emocionado y contento por la sorpresa, reclama que prendan la velita. "Bueno, voy a pedir un deseo y todos ya saben cuál es...", dice para los dos hinchas que lo acompañan en su festejo. "No lo digas, que si lo decís no se cumple", le advierten, como buenos fanáticos. Claro, el deseo (no revelado ayer por Ischia) es ganar este torneo Apertura. Y quedarse a vivir en Boca...

Equipo que gana...

Morel se recuperó y, pese a la seguidilla, Boca repite los 11 que vencieron a Central. ´Y con San Lorenzo? 

Hay algo que, en estas instancias, Boca tiene de diferente a los demás. Ese plus del que todos hablan, lo maman sus jugadores desde que pisan el club y lo sacan a relucir cuando la lucha por el torneo está más caliente que nunca. Así, después de ganarle a Central en un partido que se complicó más de la cuenta, y a pesar de que Juan Román Riquelme terminó cansado y Claudio Morel Rodríguez tuvo que salir por lesión, los mismos 11 saldrán a la cancha esta tarde ante Banfield. Y, de no mediar inconvenientes mayores, también lo harán el domingo ante San Lorenzo. Aunque nadie piensa aún en ese partido: primero habrá que ganar hoy.

Las dudas en la semana giraron alrededor del lateral (con un traumatismo en la rodilla izquierda, molestia que arrastra desde antes de viajar con su selección por Eliminatorias) y del enganche, que había estado en duda antes de recibir a los rosarinos y jugó. 

Morel ayer practicó con todo el grupo, participó del fútbol-tenis y se lo vio bien en lo físico. Por eso, según dijeron desde el cuerpo técnico, hoy estará. Después, habrá tiempo de pensar en el partido del domingo ante San Lorenzo, justamente porque para pelearle el torneo al Ciclón primero habrá que ganarle a Banfield. Y, para eso, todos quieren estar presentes. Es ese plus...

domingo, 26 de octubre de 2008

Boca 2 - Central 1

El equipo de Ischia no podía con los rosarinos pero volvió a aparecer el juvenil a tres del final para decretar un triunfo clave en la Bombonera para seguir en la lucha. Viatri, una de las figuras, había puesto en ventaja a los locales, mientras que Zelaya marcó el empate transitorio. Y con la victoria de Racing sobre San Lorenzo quedó a cinco de la punta.
PIBE GOLEADOR. Gaitán entró en el segundo tiempo y consiguió el tanto para la victoria ante Central.

Venía dulce Boca. La victoria en el Superclásico el domingo pasado le dio un envión anímico muy importante para lo que queda del Apertura y para lanzarse de lleno a la caza del Ciclón. La Bombonera bañada de sol veía una vez más a uno de sus hijos pródigos: Juan Román Riquelme, después de estar en duda, salía a la cancha para comandar al equipo de Ischia ante Rosario Central.

Todo fácil hizo Boca en los primeros minutos del primer tiempo. Ordenado con Battaglia cortando pelotas en la mitad de la cancha, con Riquelme manejando los tiempos y con Viatri picante en el área. Poco le costó llegar con peligro al área de Rosario Central. A los 3, Viatri, de cabeza, hizo revolcar al arquero Broun que contuvo en dos tiempos. Y a los 7 nomás, el equipo de Ischia abrió el marcador en la Bombonera. Centro de Román desde la derecha, Viatri les gana en el salto a los centrales Ribonetto e Ithurralde, y con el parietal izquierdo, de pique al suelo, contra el palo, estableció el 1-0 para Boca.

Automáticamente después del gol Boca se relajó. La presión de Dátolo por izquierda no era la misma, tampoco Calvo pasaba al ataque por la derecha. El mismo Riquelme se tomó un descanso dentro del partido. Morel fue el único que mantuvo la intensidad por su lateral.

Pero a pesar del quedo de Boca, Central poco pudo hacer en el primer tiempo de la Bombonera. La jugada más peligrosa para el equipo de Alfaro fue una desinteligencia entre Calvo y el arquero Javier García, que casi termina en blooper ante el asedio de Emilio Zelaya. Intentó Jesús Méndez hacerse dueño del equipo en el medio, pero sin compañía e impreciso el volante pereció en sus intenciones.

Alfaro mandaba a su equipo a presionar bien arriba. Pero la columna vertebral de Central estaba desarticulada desde el fondo hasta arriba. Danelón, devenido en lateral izquierdo para dejarle su lugar a Bogino, no encontraba su lugar en la cancha y Noir era una amenaza constante a sus espaldas. Zarif no pesaba por derecha, Borzani siempre encima de Riquelme se olvidó de jugar, y Gervasio Núñez y Vizcarra no se conectaron ni una vez para tocar y asistir a Zelaya. Sobre el cierre casi aumenta Boca con una escalada de Vargas por derecha que terminó con Broun quitándole el gol de los pies a Riquelme en el área.

Era simple para Boca en el segundo tiempo. Tenía que salir con todo, meter el segundo y bajarle la persiana al partido. Y así fue... A los 5, Román combinó con Viatri... A los 7, pared entre Riquelme y Dátolo... A los 8, Viatri para Riquelme, zurdazo y afuera... A los 9, Vargas para Noir por derecha, entró al área y lo tapó Broun... A los 12, Dátolo habilita a Viatri... Todo eso generó Boca, pero le faltó el gol.

Y Central aprovechó un error para llegar al empate. Un pelotazo larga de derecha a izquierda, Vargas la bajó de cabeza, pero Calvo no estaba. Entonces Danelón se fue solito por izquierda y mandó el centro de zurda. Cáceres, a contra pie, no llegó al cruce y Zelaya se estiró para desviar la trayectoria del balón con su pie derecho y descolocar a García para el 1-1.

Se dio al revés. Boca atacaba pero Central consiguió la igualdad. Y con el empate instalado la lógica indicaba que Boca debía ir desaforado por la victoria, pero no fue así... Boca se mostró lento, impreciso, dubitativo y encima Román se apagó. Los tuvo Battaglia de cabeza a los 16, pero se le fue al lado del palo su frentazo. A los 20, le faltó puntería a Riquelme en un tiro libre que pasó muy cerca. Pero nada más, muy tibio. Alfaro, rápido, mandó a la cancha a Martín García por Zarif para tener la pelota, y sacó a su goleador Zelaya por Jonatan Gómez. Dos pibes veloces que le dieron dinámica al juego de Central, que apostaba por una contra salvadora.

Tuvo también sus chances el Canalla en la Bombonera para llevarse los tres puntos a Rosario. Un zurdazo de Gervasio Núñez, otro de Vizcarra tras una buena gambeta en el área, y a los 41 Méndez habilitó al Chino que se fue solo, enfrentó a García y desvió su derechazo cruzado... Para esa altura Ischia ya había mandado a la cancha a Mouche por Noir y a Gaitán por Dátolo.

Y los cambios que durante sus primeros quince minutos en cancha poco habían podido hacer terminaron rompiendo el partido. A los 42, cuando parecía que Boca otra vez se iba a ir de la Bombonera sin ganar, tras las derrotas con Tigre y Estudiantes, Mouche desbordó por la derecha, Viatri bajó el centro de cabeza perfecto y Gaitán con una tijera de zurda selló el 2-1 para Boca. Desahogo enorme, en el banco, en las tribunas, en los jugadores, en Ischia y en Román... Boca sigue vivo en el Apertura y el miércoles tiene una nueva prueba, en el Sur, ante Banfield.

Boca 2 - Central 1

El equipo de Ischia no podía con los rosarinos pero volvió a aparecer el juvenil a tres del final para decretar un triunfo clave en la Bombonera para seguir en la lucha. Viatri, una de las figuras, había puesto en ventaja a los locales, mientras que Zelaya marcó el empate transitorio. Y con la victoria de Racing sobre San Lorenzo quedó a cinco de la punta.
PIBE GOLEADOR. Gaitán entró en el segundo tiempo y consiguió el tanto para la victoria ante Central.

Venía dulce Boca. La victoria en el Superclásico el domingo pasado le dio un envión anímico muy importante para lo que queda del Apertura y para lanzarse de lleno a la caza del Ciclón. La Bombonera bañada de sol veía una vez más a uno de sus hijos pródigos: Juan Román Riquelme, después de estar en duda, salía a la cancha para comandar al equipo de Ischia ante Rosario Central.

Todo fácil hizo Boca en los primeros minutos del primer tiempo. Ordenado con Battaglia cortando pelotas en la mitad de la cancha, con Riquelme manejando los tiempos y con Viatri picante en el área. Poco le costó llegar con peligro al área de Rosario Central. A los 3, Viatri, de cabeza, hizo revolcar al arquero Broun que contuvo en dos tiempos. Y a los 7 nomás, el equipo de Ischia abrió el marcador en la Bombonera. Centro de Román desde la derecha, Viatri les gana en el salto a los centrales Ribonetto e Ithurralde, y con el parietal izquierdo, de pique al suelo, contra el palo, estableció el 1-0 para Boca.

Automáticamente después del gol Boca se relajó. La presión de Dátolo por izquierda no era la misma, tampoco Calvo pasaba al ataque por la derecha. El mismo Riquelme se tomó un descanso dentro del partido. Morel fue el único que mantuvo la intensidad por su lateral.

Pero a pesar del quedo de Boca, Central poco pudo hacer en el primer tiempo de la Bombonera. La jugada más peligrosa para el equipo de Alfaro fue una desinteligencia entre Calvo y el arquero Javier García, que casi termina en blooper ante el asedio de Emilio Zelaya. Intentó Jesús Méndez hacerse dueño del equipo en el medio, pero sin compañía e impreciso el volante pereció en sus intenciones.

Alfaro mandaba a su equipo a presionar bien arriba. Pero la columna vertebral de Central estaba desarticulada desde el fondo hasta arriba. Danelón, devenido en lateral izquierdo para dejarle su lugar a Bogino, no encontraba su lugar en la cancha y Noir era una amenaza constante a sus espaldas. Zarif no pesaba por derecha, Borzani siempre encima de Riquelme se olvidó de jugar, y Gervasio Núñez y Vizcarra no se conectaron ni una vez para tocar y asistir a Zelaya. Sobre el cierre casi aumenta Boca con una escalada de Vargas por derecha que terminó con Broun quitándole el gol de los pies a Riquelme en el área.

Era simple para Boca en el segundo tiempo. Tenía que salir con todo, meter el segundo y bajarle la persiana al partido. Y así fue... A los 5, Román combinó con Viatri... A los 7, pared entre Riquelme y Dátolo... A los 8, Viatri para Riquelme, zurdazo y afuera... A los 9, Vargas para Noir por derecha, entró al área y lo tapó Broun... A los 12, Dátolo habilita a Viatri... Todo eso generó Boca, pero le faltó el gol.

Y Central aprovechó un error para llegar al empate. Un pelotazo larga de derecha a izquierda, Vargas la bajó de cabeza, pero Calvo no estaba. Entonces Danelón se fue solito por izquierda y mandó el centro de zurda. Cáceres, a contra pie, no llegó al cruce y Zelaya se estiró para desviar la trayectoria del balón con su pie derecho y descolocar a García para el 1-1.

Se dio al revés. Boca atacaba pero Central consiguió la igualdad. Y con el empate instalado la lógica indicaba que Boca debía ir desaforado por la victoria, pero no fue así... Boca se mostró lento, impreciso, dubitativo y encima Román se apagó. Los tuvo Battaglia de cabeza a los 16, pero se le fue al lado del palo su frentazo. A los 20, le faltó puntería a Riquelme en un tiro libre que pasó muy cerca. Pero nada más, muy tibio. Alfaro, rápido, mandó a la cancha a Martín García por Zarif para tener la pelota, y sacó a su goleador Zelaya por Jonatan Gómez. Dos pibes veloces que le dieron dinámica al juego de Central, que apostaba por una contra salvadora.

Tuvo también sus chances el Canalla en la Bombonera para llevarse los tres puntos a Rosario. Un zurdazo de Gervasio Núñez, otro de Vizcarra tras una buena gambeta en el área, y a los 41 Méndez habilitó al Chino que se fue solo, enfrentó a García y desvió su derechazo cruzado... Para esa altura Ischia ya había mandado a la cancha a Mouche por Noir y a Gaitán por Dátolo.

Y los cambios que durante sus primeros quince minutos en cancha poco habían podido hacer terminaron rompiendo el partido. A los 42, cuando parecía que Boca otra vez se iba a ir de la Bombonera sin ganar, tras las derrotas con Tigre y Estudiantes, Mouche desbordó por la derecha, Viatri bajó el centro de cabeza perfecto y Gaitán con una tijera de zurda selló el 2-1 para Boca. Desahogo enorme, en el banco, en las tribunas, en los jugadores, en Ischia y en Román... Boca sigue vivo en el Apertura y el miércoles tiene una nueva prueba, en el Sur, ante Banfield.

martes, 21 de octubre de 2008

En tierras brasileñas

El plantel, lleno de juveniles, ya está en Porto Alegre para el duelo de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana frente a Internacional. Ischia todavía no dio a los titulares, aunque es seguro que Figueroa debutará mañana con la camiseta xeneize.

PRESENTACION. Lucho debutará en Boca ante Internacional por los cuartos de la Copa.

Esa victoria en el Superclásico cambió absolutamente los ánimos en Boca. Con Carlos Ischia a la cabeza, un plantel juvenil viajó rumbo a Brasil para dar otro paso más en la Copa Sudamericana. Mañana, desde las 22, enfrentarán al Inter de Porto Alegre, que tiene como estandarte a Andrés D´Alessandro. Todavía no está confirmado el equipo titular, aunque se sabe que hará su debut con la camiseta xeneize Luciano Figueroa.

Llegaron a Porto Alegre al mediodía y tendrá una práctica a las 6 de la tarde. Ischia aún no dio a los 11, pero hay algunas cosas que ya se saben. Estará en el arco Javier García, ya que Mauricio Caranta otra vez no está con el equipo y tiene los días contados en Boca. En la defensa estarían Julio Barroso, Facundo Roncaglia y Rubén Fondacaro. En el medio aparecerían Leandro Gracián y Cristian Chávez, casi con seguridad. Y adelante Figueroa y Ricardo Noir.

En la delegación también están Gabriel Paletta, Josué Ayala, José María Calvo, Paletta, Damián Díaz, Ezequiel Muñoz, Gaitán, Pablo Mouche y Jonatan Philippe. No viajaron con el plantel Juan Román Riquelme, Julio Cáceres, Rodrigo Palacio y Hugo Ibarra, entre otros. Además, Fabián Vargas le dejó su lugar en la lista a Figueroa.

Caranta contra el piso

Ischia ni siquiera lo lleva a Porto Alegre. Así, ratificó que el arquero, con él, no ataja más en Boca.

MAURICIO QUEDÓ SOLO...
A esta altura, no parece ser apenas un castigo. El Caranta-gate puede costarle al arquero cordobés algo más que la ausencia en el último superclásico: todo indica que difícilmente vuelva a atajar con Ischia. Por lo pronto, el Pelado otra vez lo dejó fuera de la lista de concentrados, esta vez por la Copa. Y así ratificó a Javi García como titular para los dos torneos y a Josué Ayala, como su suplente, por lo que tampoco habría lugar para el ex Instituto en el banco.

Esto significa que los días de Caranta en Boca están contados. Al menos, en la medida que Ischia siga siendo el DT. La de ayer fue otra demostración contundente de que ya no lo quiere. Porque a la mañana bien temprano muchos tenían la duda sobre si el cordobés iba a jugar o no contra Inter de Porto Alegre. Pero el Pelado no sólo la despejó al excluirlo de la lista. También envió otro claro mensaje: ni en el torneo, ni en la Copa, ni en ningún lado, parece.

Al cuerpo técnico no le gustó cómo Caranta manejó su pedido de no atajar con Estudiantes. Primero acusó un problema personal y luego quiso culpar al entrenador de su salida. Así, Ischia fue tajante la última vez que se refirió a él: "No le dijo la verdad ni al grupo ni a sus familiares", explicó el DT las razones por las que lo sacó del superclásico. Una pena que ahora tendría varias fechas más de suspensión.

"Con Ortega caminando nos hacían más daño"

Román, un especialista en superclásicos, lo avisó en la previa y ayer insistió: "Ariel no necesita estar al 100% porque es diferente". Y dijo que Boca peleará el torneo.

Algo debe tener. Si cada vez que se cruza con una camiseta de River, termina con esa sonrisa ancha... Si, encima, la mayoría de esas veces resulta la figura del partido o, de mínima, aparece entre las principales... Si, además, le mete goles... Si, a esta altura, ya es garantía de felicidad en un superclásico... Evidentemente, el tipo, algo debe tener.

Ese quinto elemento, que va más allá de sus calidades con la pelota, podría definirse como espíritu, mentalidad o convencimiento. Pero se aceptan sugerencias para redondear la definición. Porque ni siquiera el propio Juan Román Riquelme sabe muy bien de qué se trata: "Lo que sé es que tengo la suerte de que contra River siempre me va muy bien. Cuando tengo que jugar un superclásico siempre pienso que voy a terminar feliz. Yo sé muy bien la importancia que este partido tiene para la gente de Boca, porque toda mi familia es de Boca, y por suerte me tocó perder sólo una vez, con goles de Aimar y Angel, en el Monumental", contó ayer Román, en el programa Indirecto, de TyC Sports. Ese clásico que recuerda el 10, que se jugó en el Apertura 99 (0-2), es hasta hoy la única derrota de Riquelme ante River por torneos locales en 12 partidos. La otra, que ni siquiera él la cuenta como caída, es el 1-2 del partido de ida de cuartos de la Copa Libertadores que, a la semana, se dio vuelta con un inovidable 3-0.

La estadística ubica a Riquelme como uno de los mejores jugadores de superclásicos de la última década. Todavía anda lejos de los 14 triunfos en 37 partidos de don Silvio Marzolini, récord, seguido por Antonio Rattin (12 en 27) y Antonio Roma (12 en 27) en el rubro, pero con este nuevo éxito Román ya suma seis victorias y alcanzó la línea de Guillermo Barros Schelotto (seis en 18) y Martín Palermo (seis en 15). Y quedó a sólo uno del Pato Abbondanzieri (siete en 14).

Tal vez si en Núñez lo hubieran escuchado, dada su condición de especialista en superclásicos, el domingo les habría ido un poco mejor. Pero ya era tarde para tomar el consejo de Riquelme, que en la semana había avisado que Boca tenía ventaja porque no jugaba Ortega. Y ayer sacó pecho de su vaticinio: "Con Ortega caminando, River nos hacía más daño... Por lo que representa para sus compañeros y para los hinchas. Si mal no recuerdo, en el último campeonato que River fue campeón, Ortega fue determinante en los últimos cuatro o cinco partidos, con goles y pases gol. No necesita estar al ciento por ciento, porque para mí es diferente al resto", insistió un Román feliz que, por si hacía falta, explicitaba su alegría con la inscripción de su remera: "De puta madre".

Luego, después de tirarle otro palito al River de Simeone por sus cambiantes tácticas, Riquelme le regaló una caricia muy grande a Carlos Ischia: "Hoy el hincha de Boca tendría que estar muy contento con el técnico que tiene. Lo llevó a pelear el torneo pasado hasta el final, puso al equipo en semifinal de la Libertadores, ganó la Recopa, los dos superclásicos del año, está peleando el torneo y la Sudamericana. Es para felicitarlo". Algo debe tener. No hay dudas. Nadie lo sabe mejor que un hincha de Boca. O de River.

domingo, 19 de octubre de 2008


Viatri festaja su gol.

Boca1-riVERGUENZA0

Por la fecha 10º del Apertura, Boca Juniors obtuvo una victoria espectacular en la cancha de River Plate. Fue 1 a 0 con gol de cabeza de Lucas Viatri, y con el plus de jugar casi todo el segundo tiempo con un jugador menos, por la expulsión de Hugo Ibarra.

A lo largo de todo el encuentro, Boca Juniors fue superior a River Plate. El equipo dirigido por Carlos Ischia siempre manejó el balón, y eso le dio una mayor tranquilidad en un partido tan importante.

En ese control de pelota, Juan Román Riquelme fue sin dudas el eje principal del equipo. Todos los balones pasaron por el enganche, quien hizo honor a su rol.

En el primer tiempo Boca no tuvo grandes jugadas, salvo un disparo de Jesús Dátolo.

Comenzada la segunda etapa, el equipo Xeneize tuvo una mala noticia: la expulsión del lateral Hugo Ibarra. Esto sucedió a los 8 minutos. Desde ese momento, todo el equipo dio un plus más.

Pero la gran clave estuvo a los 15 minutos, cuando luego de un centro frontal de Riquelme, Lucas Viatri se adelantó a su marcador, y desde el borde del área puso un cabezazo que hizo que el balón se meta en el ángulo izquierdo del arquero Ojeda.

Luego, Boca no se metió atrás, y siguiendo con el manejo de la pelota, evitó que River tenga jugadas para igualar el cotejo.

sábado, 18 de octubre de 2008

Marche un castigo
Ischia decidió no concentrar a Caranta para el superclásico y lo retó en público: "No les dijo la verdad ni al grupo ni a sus familiares". 
Parece difícil que Mauricio vuelva a ser titular en Boca.
Con el cabaret(é) Cáceres-Riquelme aún haciendo ruido, con algunos por acá y otros por allá, el caso Caranta pasó al olvido. En realidad el que no olvida (y castiga) es Ischia, quien tal como anticipó Olé, decidió no concentrar al arquero para el superclásico.

El pedido del cordobés de no atajar frente a Estudiantes (acusó un problema personal de su hija), su posterior declaración culpando al técnico de su salida ("No pido explicaciones cuando me ponen y tampoco cuando me sacan") y las palabras de su familia y de su representante, Luis Grillo, responsabilizando al DT, fueron el tobogán que trasladó el descenso del arquero. Por eso, el entrenador quiso blanquear su versión de los hechos. "Antes del partido con Estudiantes me pidió no ser partícipe por un problema personal. Cometió un error de hacer declaraciones cuando no las tenía que hacer y no decirle la verdad ni al grupo ni a sus familiares", bufó el Pelado. Y agregó: "Dejé pasar el tiempo, él no me ha comentado una cuestión distinta a la que me comentó ese día. No lo he visto bien también durante la semana. El que decide ahora cuándo puede volver al equipo soy yo". 

Con esta exclusión, se le abre la puerta a Josué Ayala, el pibe de 20 años que atajó para los suplentes en la práctica de fútbol del jueves y mañana se sentará en el banco por primera vez en un superclásico (ya lo hizo ante el Pincha). 

'Los días de Caranta en Boca están contados? Los papeles dicen que todavía tiene dos años y medio más de contrato, aunque es difícil imaginar su continuidad en el club con este cuerpo técnico (al que se le vence el vínculo a fin de año y aún no se habló de una posible renovación). A Ischia y a sus principales colaboradores no les gustó cómo manejó la situación el arquero. Le aceptaron las disculpas, sí, pero el castigo se hace efectivo.

Un maravilloso grupo humano
El plantel habló una hora y 20 minutos. Cáceres ofreció disculpas y Román fue cuestionado. "Yo soy así", dijo el 10.
Contrastes. Mientras Julio César Cáceres apareció tempranito (9.17), Juan Román Riquelme lo hizo casi sobre la hora del entrenamiento (9.45). El paraguayo aterrizó en un Mercedes Benz, blanco; el argentino, en un Audi A4, negro. Así de opuestos, hasta en ese insólito detalle del color de autos, andan por la vida el volante histórico y el defensor guaraní. Contrastes que se vieron antes, durante y después de esa famosa reunión, que duró una hora y veinte minutos, y sirvió para darles algunos puntos de sutura a las heridas de este maravilloso grupo humano de Boca.

En el vestuario de la Bombonera, minutos antes de las diez de la mañana y tras una de esas introducciones de ocasión de los dirigentes Juan Carlos Crespi y José Beraldi, al fin se encontraron cara a cara Riquelme y Cáceres. Tras la charla del técnico, que pidió que se dijeran todo lo que se tenían que decir para cerrar definitivamente esta historia, de a uno fueron saliendo del vestuario dirigentes, utileros, médicos, kinesiólogos y hasta el cuerpo técnico para que los jugadores se sinceraran en la más absoluta intimidad. No hubo tonos elevados, ni discusiones acaloradas. Pero sí se puso en palabras todos esos dimes y diretes que hasta ayer se ventilaban por otros lugares. Y, si bien no eliminó mágicamente las diferencias entre Riquelme y una parte del plantel, sirvió para sellar la paz hasta la reestructuración de fin de año.

"Yo quiero pedirle disculpas a todo el grupo", arrancó la ronda el paraguayo, excusándose en las formas, por las declaraciones que hizo desde Paraguay, pero sin retroceder demasiado en el fondo. Y sin pasar por alto ese "este muchacho" con el que Román trató el jueves a Cáceres en la conferencia de prensa. Tras esas disculpas, un Martín Palermo moderador hizo lugar a los demás cuestionamientos. "Román, acá también hay algunas actitudes tuyas que molestan", abrió el juego el goleador, con un liderazgo legitimado por el grupo. Y ahí el 10 escuchó lo suyo: desde consideraciones por su humor inestable, porque "un día saludás y otro no", pasando por ciertos privilegios, y hasta terminar en reproches por comentarios despectivos que Román les hizo a unos compañeros de otros. Nada pareció conmover demasiado a Riquelme: "Yo soy así y no voy a cambiar. Esta es mi forma de ser. Adentro de la cancha somos un equipo, afuera no quiero ser amigo de ninguno", respondió para lo primero. Y, sin perder la calma, les repreguntó: "'No me entreno todos los días con ustedes? 'De qué privilegios me hablan?". Y por esos "me dijeron que me dijiste" tampoco se alteró. La conclusión final de Riquelme puertas adentro fue muy clarita: "En el 2000 estábamos mucho peor que ahora y salimos campeones del mundo". Puertas afuera, antes de dejar el club, pasadas las dos y media, el 10 fue un tanto más sintético: "No pasó nada. Puro puterío. El domingo le ganamos a River", les dijo a los suyos.

Además de Cáceres, Palermo y Riquelme, en esa prolongada reunión que hizo que el entrenamiento empezara recién a las 11.20 de la mañana, también se escucharon las voces de un Ibarra que respaldó a su amigo Román, de un Caranta que sumó su descontento con algunas actitudes, de un Battaglia componedor y, también, la de un Palacio que le pidió a Román respeto para cuidar la convivencia. Después de la charla, con todo dicho, el cabaret se cerró con el firme propósito de ganarle a River para dejar todo esto atrás. Igual, claro, la primera imagen de la práctica fue una postal: todos jugando un loco y Román e Ibarra elongando a un costado. Luego, el 10 por un arco y el 2 por el otro.

Ya no hay más tiempo para la terapia de grupo. Mañana hay un superclásico. Y el lunes Dios dirá...

viernes, 17 de octubre de 2008

Charlemos un ratito
Los jugadores xeneizes se tomaron una hora y veinte minutos para hablar, en el primer entrenamiento después del cruce de Riquelme y Cáceres. El fútbol, a sólo dos días del Superclásico con River, quedó para después. 
Tensión. Los jugadores de Boca no iban esta mañana a una práctica cualquiera. Era la última antes del Superclásico y además la primera luego de la increíble polémica pública entre Juan Román Riquelme ("Yo no puedo defender a este muchacho") y Julio César Cáceres ("Es una persona complicada"). El resultado: el diálogo prevaleció sobre el fútbol y todavía se desconocen los resultados. 

El entrenamiento estaba convocado para las 10, pero las actividades físicas no arrancaron sino hasta las 11.20. En el medio hubo una charla a puertas cerradas en la que, se descuenta, jugadores y cuerpo técnico hablaron del papelón ocurrido la semana pasada y que estuvo enmarcado en una muy mala racha de resultados de Boca.

A la salida de esa conversación, Cáceres mostró una imagen aliviada y hasta sonriente. A Riquelme se lo vio con el semblante de siempre: tranquilo, realizó ejercicios físicos con Ibarra, mientras el paraguayo jugaba un "loco" con el resto de los futbolistas.

Otro capítulo de la historia se dio en el fútbol-tenis. En ese momento de integración de los jugadores, Román se quedó a patearle penales a Caranta. Otra manera de evitar, al menos públicamente, a Cáceres.

En resumen, todavía habrá que esperar para conocer el final de la historia. Pero es claro que un capítulo muy importante se escribirá el domingo en el Monumental. Si hay victoria, puede ser que todos empiecen a llamarse a silencio. Si no, es muy probable que la sangre siga corriendo.

jueves, 16 de octubre de 2008

Pegó sin pegarRiquelme habló en conferencia de prensa y dijo sobre Cáceres: "Si tengo que hablar con este muchacho lo voy a hacer". También, le contestó con altura a Ahumada: "No se trata de comparar lo que gané yo con lo que ganó él". Y además, tocó un tema áspero para River: "Es una ventaja que ya no tengan a Ortega". Un Román picante. Juan Román Riquelme aprendió todos los secretos del oficio. Una vez más quedó demostrado. Porque además de "hacer su trabajo" en el campo de juego, de ser un líder futbolístico en cada equipo que le toca participar, de manejar a la perfección los códigos de vestuario, de negociar con los dirigentes y de seducir a la mayoría de los entrenadores, declara a la prensa con la misma clase con la que juega. Sin enfrentarse con Julio César Cáceres, sin embarrarse para contestarle a Oscar Ahumada, sin caer en la bajeza de pegar o pegar y hasta haciéndose parte de la derrota de anoche de la Selección a pesar de no haber jugado, Riquelme fue duro con todos... Pero sin decirlo. O mejor dicho, lo dio a entender. Sobre Cáceres dijo: "El domingo vamos a jugar un partido de fútbol. Las cosas se hablarán en el vestuario. Yo no les voy a contar lo que hablo en el vestuario. Si él te cuenta es problema de él. Mi trabajo es entrenar de lunes a sábado. El viernes Ischia nos hace concentrar. Y Riquelme se concentra. Pero no te voy a contar lo que hablo con mis compañeros. Si tengo que hablar con este muchacho lo voy a hacer", tiró. 'Quedó claro? Sobre Oscar Ahumada dijo: "Intentaremos ganar como ganamos el último clásico. No se trata de comparar qué gané yo y qué ganó Ahumada. Cada uno es libre de decir lo que quiere. Somos el equipo más grande del país y tenemos la obligación de atacar siempre". Además, le tiró la pelota a River. Tocó un tema áspero para los de Núñez. "Ellos no tienen a Ortega, el jugador más desequilibrante en el campeonato pasado. Hoy ya no lo tienen y eso es una ventaja para nosotros", dijo. Léase: "No digan que en Boca hay problemas porque ustedes acaban de limpiar a un ídolo..." En cuanto a la Selección, se hizo parte de la derrota de anoche en Chile a pesar de no haber participado: "Nos dolió el partido de anoche. Ayer se vio un equipo que nos superó por momentos", dijo, siempre hablando en primera persona. Por último, habló del Superclásico del domingo: "Es el partido más importante del que un jugador puede participar. No solamente acá, sino en Europa. Por eso estar en la cancha el domingo va a ser una suerte. El campeonato es largo y si ganamos vamos a tener chances de pelear el torneo". Un Román exquisito, hasta para declarar.

Entre ceja y ceja

Se acerca el clásico y Riquelme está cada vez más enchufado. Ayer jugó más cerca del arco, clavó tres goles en la práctica de fútbol y el que lo sufrió es Caranta, que jugó para los suplentes.
Se frena. Amaga. Pasa su pierna derecha por encima del balón. Y con la zurda la mete de emboquillada. Todo en una fracción de segundo. El no lo festeja, pero hay aplausos, desde la tribuna y de algunos compañeros. Así está Román. Contento, se lo ve. Sonriente. Motivado. Enchufadísimo. Con ganas de que sea domingo. Así lo sufrieron los defensores del equipo rival, lo sufrió el pibe Muñoz y también Julio Barroso, centrales del equipo suplente. Pero más que nadie lo sufrió Mauricio Caranta. Sí, justamente él, de quien se dijeron tantas cosas, antes y después del partido ante Estudiantes, sobre su relación con el 10 y de la relación del 10 con su salida ('de Boca?). Sí, justamente él tuvo que ir a buscar tres tiros de Riquelme dentro de su arco, con cara de "'por qué a mí?". Es que cruzarse con este 10, que desde que regresó de la Selección intenta enterrar lo que se dijo de él en las últimas semanas, es tener mucha mala suerte...

Fue raro ver enfrentados a dos hombres que, hasta hace 15 días, jugaban para el mismo equipo. Raro también fue observar a Caranta atajando por primera vez para los suplentes (en la práctica del sábado, hizo diferenciado). Claro, más raro fue para el propio arquero tener a Román tres veces mano a mano y verse obligado a ir a buscar la pelota adentro la misma cantidad de veces. No parecía feliz el cordobés, todo lo contrario. Se lo vio apagado y distante durante la hora que duró el partido. Una imagen que contrastó con la del enganche, al que se pudo escuchar dando indicaciones (sobre todo a Dátolo y Neri) y mostrando mucha movilidad, aunque de ninguna manera demostró tener animosidad en sus definiciones frente al ex uno. Pero claro, aunque no hayan sido a propósito, sus tres goles dejaron una sensación de silenciosa revancha. Es que Román, cuando Caranta quedó afuera del partido con Estudiantes hace 10 días, fue señalado como el responsable de su salida por la relación que mantiene con el arquero (más allá de que, oficialmente, se haya dicho que fue un problema familiar el que le impidió atajar en ese partido). Después, el escándalo quedó sepultado por uno mayor cuando Cáceres habló en Paraguay.

Más allá del duelo futbolístico que mantuvieron ambos en lo futbolístico, más allá de a quién le convirtió los goles, Román hizo una práctica bárbara. Primero, realizó todos los trabajos físicos a la par de sus compañeros, saltando conitos y haciendo pasadas. Y después, parado de media punta de a ratos, moviéndose por todo el centro del campo, tomando constante contacto con el balón, y, sobre todo, llegando mucho al área para asistir y también para definir, una cuestión inherente a la posición, más adelantada, que probablemente ocupe el domingo (ver Cambió de...). Román tiene entre ceja y ceja el arco. Y a River, claro.

El primero del hat-trick fue una obra de arte, cuando apenas iban 11 minutos del picado: con el amago, dejó tendido en el césped al arquero y definió por arriba de emboquillada. Después del empate de Pochi Chávez y del cabezazo perfecto de Viatri para el 2-1, llegaron dos definiciones similares: desde el borde del área, cruzadas, una con derecha y la otra de zurda. En el 3-1, contó con la colaboración del 9, que pivoteó, la aguantó y se la dejó servida para definir ante la salida de Caranta. El último fue obra exclusivamente suya: dejó atrás a Benavídez y Damián Díaz, mientras entraba al área, y la tocó perfecta, cruzada, rasante, dejando sin chances a Caranta. A un Caranta que sólo espera, como todos los hinchas de Boca, que el próximo que lo sufra sea, este domingo, Juan Marcelo Ojeda...