Tras un un flojo semestre, Gracián sólo piensa en hacer una buena pretemporada para ser tenido en cuenta por Ischia. "No llegué al nivel que quería por eso ahora tengo que tratar de demostrarle al técnico que puedo estar en el equipo", analizó.
SE TIENE FE. "Cuando tuve que reemplazar a Riquelme lo hice muy bien". Leandro Gracián no se desanima. Tras un flojo fin de semestre, con una estado gripal fuerte con impacto hepático que le impidió jugar los últimos partidos, el enganche sabe que deberá hacer una buena pretemporada si quiere ser tenido en cuenta por el técnico Carlos Ischia. A pesar de los rumores que indican que su futuro estaría lejos de Boca, por ahora lo cierto es que sigue en el club.
"Estuve 15 días bastante mal y sólo me enteré de las cosas por lo que leía o escuchaba, pero nada más. Hablé con mi representante y no hay nada claro", contó el ex Vélez en el programa Vamos con Niembro por Radio Del Plata. "Tengo muchas ganas de quedarme", agregó para despejar dudas.
La clave para Gracián estará en la pretemporada. "Más en un club como Boca, donde hay mucho por delante. Cuando tuve que reemplazar a Riquelme lo hice muy bien, pero su vuelta influyó y yo jugué poco".
"No llegué al nivel que quería. En una posición como la mía es más difícil recuperar el nivel. Se juega con mucha presión, la marca está muy exigente. Por eso tengo que tratar de demostrarle al técnico que puedo estar", analizó.
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