titulares 2 - suplentes 4

Ay, muchachos, si los viera el doctor Bilardo!

Obsesivo como pocos, el Narigón seguramente no hubiera permitido que su equipo no ganara una práctica de fútbol. Y ni hablar de la posibilidad de que no lo hiciera en ninguna. El Narigón siempre sostuvo que los jugadores llegan motivados al domingo si obtienen un triunfo el jueves. Pero este Boca de Ischia es todo lo contrario. En los entrenamientos, el equipo no aparece ni deslumbra. No hay resultados apabullantes ni goleadas rutilantes. Al revés. En lo que va del año, todavía no pudieron celebrar una victoria. Pero los domingos, a la hora de jugar por los porotos, los muchachos dicen presente. Y ahí sí, gana Boca.

Antes de los partidos ante Central, Argentinos y Gimnasia, los titulares no anduvieron bien. Y ayer se repitió la historia. Los suplentes ganaron 4-2 (goles de Roncaglia, Dátolo, Gracián y Caranta en contra; Ledesma y Monzón para los perdedores) y superaron en el trámite a los que enfrentarán a Huracán. Queda claro que Ischia tiene jugadores que no se destacan ni se hicieron famosos por sus actuaciones en las prácticas. Por el contrario, cuenta con tipos como Riquelme o Palermo, que brillan por lo que hacen cada fin de semana. Entonces, es común verlos regular (sin dejar de jugar en serio) en los entrenamientos, conscientes de que lo que realmente importa es cuando se juega por los puntos.

Otro tema a tener en cuenta es la calidad del equipo de suplentes. Siempre se habló de la riqueza del plantel y eso queda en evidencia cuando se paran los dos equipos en la cancha. ¿O acaso Gracián, Dátolo, Neri Cardozo o Castromán, por poner algunos ejemplos, no serían titulares en casi todos los otros equipos del país? Además, es lógico que el que está afuera se mate por ganarse un lugar o demostrarle al técnico que puede ser titular. De todos modos, se nota que Ischia no define al equipo por lo que pasa en las prácticas de los jueves. Porque si no, habría jugadores que no podrían faltar y sin embargo todavía no se terminaron de acomodar en Boca. Dátolo, por caso, es un jugador que hace goles en casi todas las prácticas y que se muestra siempre enchufado. En cambio, todavía no pudo rendir en los partidos como él mismo quiere.

Por eso, más allá del rendimiento de cada jueves, Ischia no se va preocupado después de las prácticas. Al contrario. Sabe que sus jugadores le van a responde en la cancha, como lo hicieron el domingo frente a Independiente, cuando sacaron adelante un partido muy complicado con mucha personalidad y fútbol. "Siento orgullo por este equipo. El esfuerzo que hizo fue conmovedor", dijo el DT tras el clásico.

¿Que Román ayer no metió ningún pase de otro planeta? ¿Que Palacio no desbordó como un rayo y asistió al Loco? ¿Que Palermo no pudo convertir un golcito que le alimente el hambre de gol? ¿Que Caranta no fue salvador como en los últimos partidos? No hay drama. Ischia sabe que tiene jugadores domingueros, afectos a divertirse en los partidos, y que los días de práctica de fútbol cuidan piernas y desgaste para el momento indicado. Sólo una persona debe estar caminando por las paredes: ¡si los viera el doctor Bilardo, muchachos!